Cuando todo parecía perdido,
hasta el dulce olor a primavera...
llego de nuevo el amor y su embestida,
sin avisar si quiera.
Y volvieron a brotar flores,
yo desnudo ante un mundo tan nuevo,
y familiar, es cierto,
y un vacuo lamento,
como el que oculta su felicidad
por miedo a la bala
de una oscura realidad.
Todo tan hermoso, todo tan fugaz,
como el cantar de un pajaro,
sobre el rumor del mar.
Voy a ser todo lo que guardo
pasión, amor, fidelidad,
florecerá de nuevo el lago.
Y las mariposas resurgirán.
Es cierto.
Y todo para mí
formará un dulce corazón:
el ventanal mojado del coche,
la nube desde el avión,
un par de ramas, o un viejo broche
de mi primera comunión.
Pero cuando quiera cernirse
sobre mí oscura la sombra
yo sabré esperar
como supe.
Porque descubrí que el mal,
tal y como llega, se va.
Y tal y como dijo Bécquer
"Volverán las oscuras golondrinas",
volverán...
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